Charles Darwin: cazador y coleccionista . Hace 200 años nació el científico Charles Darwin, el padre de la Teoría de la Evolución, que descubrió, por casualidad, cómo se desarrollaban los organismos, animales y plantas.
Era joven. 22 años. Hijo de familia adinerada. Estudió Teología de la Naturaleza, aunque su padre hubiera preferido que se dedicase a la medicina, y se pasaba el día mirando las moscas. Sus pasiones: la caza, la equitación y la naturaleza.No era particularmente ambicioso, pero mostró gran entusiasmo ante una maravillosa oportunidad que le ofrecieron: salir a ver mundo en el barco de exploración Beagle.
Zarpó a finales de diciembre de 1831, y el viaje tuvo una duración de 5 años. Fue el comienzo de la peor agonía de Charles Darwin. Sufrió terriblemente, se mareaba tanto que apenas se tenía de pie. El capitán llegó a dudar de que el científico pudiera completar el viaje de una pieza.
A pesar de ello, consiguió acostumbrarse al eterno balanceo, y volvió a percibir lo que había a su alrededor una vez más. El viaje cambiaría su vida y su opinión del mundo por completo.
La fiebre cazadora y coleccionista de Darwin
Dondequiera que Charles Darwin ponía un pie, coleccionaba lo que veía. Piedras, plantas secas, fósiles de esqueletos animales, insectos, infinitas cantidades de escarabajos, un buen número de aves exóticas que encontró únicamente en las Islas Galápagos: "Cazó muchas de estas criaturas, que hoy llevan su nombre", dice el historiador científico Profesor Ernst Peter Fischer.
No obstante, a la hora de coleccionar pájaros, no prestó demasiada atención: "Por ejemplo, se olvidó de marcar el lugar del descubrimiento de las aves. Simplemente, las juntó en un saco y se las trajo de vuelta a Inglaterra con la intención de enseñárselas a algún ornitólogo".